VERGÜENZAS Y DESACIERTOS.- La chinga de este domingo XIII

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Gianni Castro Casanova Autor

 

Por: Gianni CASTRO CASANOVA

¡Si no pueden, que renuncien! Era el clamor popular ante los hechos de violencia que hasta hace muy pocos meses sacudían al país luego de la guerra contra el narco que emprendió el expresidente Felipe del Sagrado Corazón de Jesús Calderón Hinojosa.

Nosotros creemos que esa frase bien debe aplicarse a todos los ámbitos y sectores del quehacer público, incluso el privado, y dar paso a gente que sí pueda con el paquete encomendado.

Lo anterior viene a colación debido a la terrible irresponsabilidad demostrada por los concesionarios del servicio público de pasajeros en diversos puntos de la capital yucateca los pasados 25 de diciembre del año pasado y 1 de los corrientes.

En el norte de la ciudad, los camiones de la corruptísima empresa “Minis 2000” simplemente no circularon. Hubo personas que tuvieron que esperar hasta tres horas para poder subirse a una unidad, en específico de las rutas Komchén, Dzitiá, Chuburná Inn, Francisco de Montejo I, II y III. Por si fuera poco, las combis concesionadas para las rutas de Komché, Dzitiá y Las Américas simplemente no circularon todo el día.

La Dirección del Transporte del Estado de Yucatán, que tiene por titular al no menos corrupto Humberto Jesús Hevia Jiménez, se hizo de la vista gorda, dejando a los usuarios del servicio a la bendición de Dios y bajo la amenaza de los taxistas de esta ciudad, que es una de las que más caro cobra dicho servicio.

Si la empresa “Minis 2000” no puede con el paquete ¡que renuncie a su concesión!, si los combistas prefieren tomar los tragos a trabajar ¡que dejen de prestar el pésimo servicio que “proporcionan”!

No se vale dejar incomunicado a un sector de la ciudad todo un día por ser éste de fiesta. De ninguna manera, así que si no pueden ¡que renuncien!