Por: Juan Pablo TOPETE QUIJADA
Casual vestimenta lucieron los miembros de la banda británica “Cold Play” durante el esperado espectáculo del Súper Tazón en su edición 50, entonando sus más grandes éxitos como viva la vida, que abrió Chris Martin desde el campo de juego, saco en negro y cuello mao, con vivos en bordados geométricos en un azul rey sobre los puños y el hombro izquierdo, donde se hubiera esperado algo de mayor formalidad e impacto siendo no solo este acontecimiento de trascendencia mundial, sino también un significativo aniversario de este evento deportivo, que por muchas décadas también ha llevado consigo espectáculo musical de gran impacto.
Teniendo este año como sede el Levi´s Stadium en Santa Clara, California, después cantando su éxito “A head of dreams” y “adventure of a lifetime”, invitando ahora a Beyonce y Bruno Mars, este último acompañado de Mark Ronson interpretó “uptown funk” y vestido en pantalón entubado en cuero negro, y chaqueta de igual color con vistosas cadenas como accesorio y Beyonce presentando para la ocasión un body en cuero negro, resaltando su esplendorosa figura bajo una chaqueta del mismo material, con botonadura dorada al frente, del hombro al codo y bajo el puño también y un par de tiras atravesadas sobre el pecho, tal como si fueran carrilleras de balas de una Adelita, quedando la confusión si hacía referencia a alguna situación bélica o solo un accesorio mas, tal vez en homenaje a los vestuarios presentados por el extinto Michael Jackson, en tono con sus interlocures de show, un medio tiempo que dejó un vacío de lo que se esperaba de este tipo de eventos, habiendo ahora durado tan solo 15 minutos y de una simpleza no esperada, a la luz del día sin el efecto visual que los juegos de luces pudieran haber dado mayor relevancia a la tarde.
